Cuatro estudiantes de pregrado de la Universidad Estatal de Carolina del Norte están tratando de producir un esmalte de uñas que revelará la presencia de “drogas de violación” como Rohypnol y GHB, la peculiaridad de este esmalte es que cambia de color en la presencia de estas sustancias.
“Con nuestro esmalte de uñas, cualquier mujer tendrá la facultad de garantizar discretamente su seguridad simplemente revolviendo su bebida con el dedo”.
“A través de este esmalte de uñas y otras tecnologías similares, esperamos que posibles perpetradores les dé miedo de poner drogas en la bebida de una mujer porque ahora corren el riesgo de ser atrapados”. “Queremos el miedo de las víctimas lo sientan los perpetradores. Nos llamamos Colores Encubiertos y somos la primera empresa de moda en empoderar a las mujeres para prevenir el asalto sexual”.
Tecnologías Drinksafe ha distribuido millones de portavasos que cambian de color si una gota de una bebida que contiene fármacos comúnmente usados en violaciones es derramada sobre ellos. El esmalte de uñas puede ser técnicamente más difícil de trabajar que el cartón, pero tiene la ventaja de ser más discreto para aquellos que no quieren hacer obvio que están considerando la posibilidad de que su bebida pueda estar adulterada.
Hasta ahora, Colores Encubiertos no está revelando muchos detalles. El proyecto, que surgió de una iniciativa de la Universidad para que los estudiantes atacaran problemas existentes en el mundo real, parece estar muy lejos de llevar su producto al mercado. Su sitio web solo tiene un logotipo y una solicitud para donar a su investigación. Los cuatro fundadores están estudiando Ciencia de los Materiales e Ingeniería. El portavoz Ankesh Madan dijo, “Todos nosotros hemos estado cerca de alguien que ha pasado por la terrible experiencia, y comenzamos a centrarnos en encontrar una manera de ayudar a prevenir el delito.”
Muchas personas están claramente entusiasmadas con la idea de este esmalte de uñas, comentarios como: “No puedo esperar a que esté disponible, con gusto comparare cajas para dar a mis estudiantes”. Sin embargo, Karen Pickering, co-fundadora de Melbourne Slutwalk, una manifestación en contra de la violación y de la culpabilizarían de las víctimas, sostiene que, “Ninguna cantidad de preparación o la tecnología nos protegerá del hecho de que la inmensa mayoría de asalto sexual es cometido por hombres conocidos y de confianza para las víctimas”.
Aunque inventos como este no acaban con el problema, cada día existen más armas que las mujeres pueden obtener para estar más seguras en las calles.